Los habitantes de la ciudad soviética, hoy San Petesburgo, sufieron el acoso del ejército enemigo durante cerca de cuatro años. Muchas familias rusas murieron de inanición o de frío ya que era imposible salir de la ciudad y mucho más difícil era llevar víveres a los habitantes de la ciudad zarista.
El hambre y el instinto de supervivencia fue tal que se llegaron a casos extremos de antropofagia y comercio de cadáveres.
En 1944 el ejército nazi, agotado y teniendo que acudir a frenar la entrada de los aliados por Italia y Francia fue vencido y expulsado de la URSS.
En este ambiente se mueve el libro del que os quiero hablar hoy Ciudad de ladrones de Davud Benioff.
Lev, un joven ciudadano de San Petesburgo acusado de robo, y Kolya, un joven soldado soviético acusado de deserción, forman una curiosa pareja que intentan redimir sus penas de muerte realizando una misión suicida para un alto cargo del ejército soviético.
Ambos recorrerán la ciudad y saldrán de ésta acercándose al frente de guerra para llevar a buen puerto la surrealista misión.
Un libro muy recomendable, muy fácil de leer y que nos hará ver las miseria y penas de la guerra, a través de situaciones con mucho humor.
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